Localizado en la ribera del río Duero, y situado prácticamente en la cima del páramo, mirando de reojo al Duratón, su término municipal limita con la provincia de Segovia.

La Iglesia de la Virgen de la Asunción, patrona de la localidad, data del siglo XII. De estilo románico-gótico y realizada en piedra con una esbelta torre, sus naves están cubiertas por bóvedas de arista y yeserías del siglo XVIII. En su interior destaca además el retablo mayor, obra barroca del XVII, es una verdadera maravilla contemplarla.

Pero más que la iglesia, lo que nos va a sorprender es la Ermita de la Virgen del Olmar. Ubicada en un lugar maravilloso, sobre una ladera escondida entre vegetación abundante, es un edificio de piedra, con espadaña. Para llegar hasta ella, hay que coger el camino que sigue todo recto junto al cementerio.

Además de estos dos templos religiosos, esta localidad vallisoletana posee un excelente mirador natural sobre el valle del Duratón y un barrio de bodegas en la parte baja del pueblo, desde el que se puede disfrutar de las altitudes de estos páramos ribereños.

Paseando por Canalejas, y observando la Ermita de Nuestra Señora del Olmar, se encuentra la «Cueva Eremitorio del Olmar».

Canalejas de Peñafiel celebra su primera fiesta en época del Corpus Christi, con actos religiosos y verbenas. También de un carácter religioso es la romería con la Virgen desde la iglesia hasta la ermita, el primer fin de semana de julio, con motivo de la festividad de la Virgen del Olmar. La última celebración del año es en honor a Nuestra Señora de la Asunción.

Gentilicio de Canalejas de Peñafiel: castaños.