La Cueva de Roa
La Cueva de Roa
Sobre
Dejando atrás Roa y siguiendo el curso del Duero, nos encontramos con este pueblecito ribereño llamado La Cueva de Roa en la misma vera de nuestro gran río.
A pesar de su nombre, no aloja ninguna cueva en su término. El origen del mismo se debe al noble Beltrán de la Cueva, que en el siglo XV recibió, como pago a sus favores, un título nobiliario y varias ciudades entre las que se encontraba Roa. Como entonces este pueblo dependía de la Tierra de Roa, terminó cogiendo el nombre del noble y el apellido de la ciudad a la que pertenecía: La Cueva de Roa.
Asentada en una amplia zona de vega entre el canal del Riaza y la margen izquierda del Duero, a tan sólo 5 kilómetros de Roa, podemos visitar esta localidad burgalesa que cuenta entre su patrimonio con la Iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, que sólo conserva de época románica la portada inserta en el muro meridional de la nave y que, en 2013, fue reformada gracias especialmente a la colaboración vecinal. Además tiene una fuente lavadero en el casco urbano y dos ermitas: la de San Isidro y la de la Virgen de la Vega, cuyo entorno permite disfrutar de un área recreativa perfecta para meriendas ribereñas. Si queremos seguir disfrutando del paisaje, podemos recorrer el sendero de las Cañadas, que sale y llega de La Cueva de Roa rodeando durante 10 km un pequeño tramo del mencionado Canal del Riaza, incluyendo uno de sus saltos de agua.
La Cueva de Roa celebra sus fiestas por San Isidro (15 de mayo), en Acción de Gracias (agosto) y en honor a Santo Domingo de Silos (20 de diciembre). Además, el 8 de septiembre celebran la romería de la Virgen de la Vega, bailando dentro de la misma ermita.
Gentilicio de La Cueva de Roa: covanchos.